Me encontraba explorando al Sur-Oeste del bosque Segna, en estas gélidas tierras pocos son los que se aventuran en solitario pues tienen fama de ser el hogar de terribles bestias y no son pocos los que tras haber resucitado balbucean sobre la muerte blanca. Agazapado en la espesura mi radar me indicaba que una forma de vida se encontraba cerca de mi, utilizando el visor de mi rifle comencé a escudriñar entre la hierba alta buscando el animal. El bicho se mimetizaba perfectamente con el paisaje y su color blanco como la nieve unido a su dibujo atigrado gris lo hacían virtualmente invisible, di gracias a mi rastreador de formas de vida, sin él seguramente no habría encontrado nunca a este animal hasta que no le hubiera pisado la cola. Permanecí un rato observándolo y asegurándome de que no hubiera otro en la zona, era el primer Phasm que cazaba y puesto que no conocía su fuerza real era mejor no tentar a la suerte y cazarlo de uno en uno.
Mi dedo indice jugueteaba sobre el gatillo de mi Marbel hasta que la impaciencia me hizo desatar la tormenta con un primer disparo, el animal, lejos de intimidarse, corrió en mi busca con la mirada fija en mi, me hizo dudar de si esto había sido una buena idea, cuando llego a mi altura sentí como sus garras trataban de abrirse paso a trabes de mi armadura, la lluvia de fuego y sangre era abrumadora, la fuerza y velocidad del bicho me dejaron horrorizado. Comprobada la bravura del animal tomé la decisión de acoplar el amplificador Dante a mi arma ya que no estaba seguro de mi victoria, esta ayuda extra me sirvió para convencerlo de que yo era el macho dominante y que moriría a mis pies.
Con el combate terminado rebusque mi botín entre los despojos del animal, 56 peds que servirán para que yo sobreviva un poco mas en esta tierra.
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