Materialización en 4,3,2,1...
...un Atrax me ataca, no hay tiempo para saludos, desenfundo mi arma y comienzo a disparar, sin tregua otro Atrax se une a la carnicería. Las fauces dentellean ávidas de alimento, saco varias veces mi botiquín para las curas de urgencia, no cesan los ataques. Tres Atrax mas se acercan a mi posición, es el momento de sacar armas mayores.
Rodeado por la jauría no puedo despistarme, vigilo mis constantes vitales para que no mengüen demasiado, una cura, otra cura, una oportunidad mas de enseñarles quien manda. Van cayendo uno a uno y mi victoria se vislumbra cerca, sus cuerpos se desploman a mi alrededor y con el ultimo suspiro del ultimo de ellos vuelve la calma al páramo. El botín conseguido no ha sido demasiado bueno pero sigo vivo y el día es largo, mas allá de aquellas rocas seguro que encontrare otras presas.
Ahora si, me relajo, tengo tiempo, contacto con mis camaradas y me dan la bienvenida, no hay noticias nuevas, todo sigue como siempre.
Recuperada la salud y 40mil balas para gastar. Pongo rumbo al este, espero que la ronda se me de bien y conseguir un par de buenos premios sino, habrá perdidas. Por suerte, siempre puedo volver a intentarlo mañana.
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